martes, 1 de octubre de 2013

Madrid propone retirar los coches oficiales... que renovó en mayo

MADRID.- El Grupo Popular va a proponer hoy en la Junta de Portavoces eliminar los coches que disponen los portavoces para que los partidos, en palabras de Ignacio González, "funcionen con los medios que los propios grupos tienen". 

Si la iniciativa sale adelante, Tomás Gómez (PSOE) y Gregorio Gordo (IU) dejarán de tener coche oficial, ya que los portavoces de PP y UPyD renunciaron a ellos. Sin embargo, fuentes del Partido Popular no han sabido concretar a El Confidencial si podrán rescindir el contrato de renting que firmaron con la empresa Finanzia Autorenting S.A., por el cual se comprometían a pagar 60.000 euros a cambio de mantener el alquiler de diez vehículos hasta mediados de 2014.
La Asamblea de Madrid tramitó el 18 de abril por la vía de urgencia la contratación del arrendamiento de los diez vehículos que mantiene en la flota. El lote fue adjudicado en mayo a la única compañía candidata, que ahora deberá revisar su contrato para verificar si, de salir adelante la petición del Grupo Popular, la Asamblea de Madrid podría deshacerse del contrato de renting vigente o, por el contrario, deberán abonar lo acordado hasta mediados del próximo año.
UPyD fue el partido que propuso el pasado octubre suprimir los coches oficiales de los portavoces de los grupos parlamentarios, miembros de la Mesa y del secretario general de la Asamblea de Madrid. Entonces, la Asamblea de Madrid mantenía 18 vehículos oficiales: cuatro Peugeots 407, un Audi A6, tres Peugeots 406 y diez Volkswagen Passat. Su portavoz, Luis de Velasco, argumentaba entonces que en una asamblea autonómica no son necesarios los coches oficiales y prescindir de ellos supondría una posibilidad de ahorrar “en un gasto superfluo”.
El líder regional de la formación magenta propuso que sólo tuviera coche oficial el presidente de la Asamblea, José Ignacio Echevarría, y como máximo hubiera tres vehículos más de incidencias. Él fue el primero en renunciar al vehículo oficial, y su ejemplo lo siguió el portavoz popular, Íñigo Henríquez de Luna. Quienes lo mantienen y a quienes afectaría la nueva medida que ayer anunció el presidente de la Comunidad, Ignacio González, como un ejercicio de “responsabilidad” afectaría al PSM, IU y a los siete miembros de la Mesa.
Dieciséis chóferes en nómina
La medida afectaría también de lleno a los chóferes que conducen los vehículos. Según los datos que maneja UPyD, había dieciséis chóferes para conducir los 18 vehículos oficiales que circulaban a nombre de la Asamblea hasta octubre de 2012. Diez de ellos eran funcionarios y seis pertenecían a personal eventual, nombrados a dedo. "¿Qué va a pasar ahora con estos trabajadores?", se preguntan ahora desde la oposición.  
El presidente de la Comunidad de Madrid mantuvo ayer una reunión con su grupo parlamentario en la que anunció esta medida. También aprovechó para solicitar que los partidos políticos publiquen sus cuentas, en un intento de mejorar la transparencia y el funcionamiento democrático. Unión Progreso y Democracia vuelve a ser el único partido representado en la Cámara madrileña que ya tiene publicada sus cuentas en su web. Fuentes del Partido Popular aseguran que quieren hacerlo de una manera mucho más "milimétrica, no tan general". La Mesa de la Asamblea de Madrid aprobó en septiembre publicar las nóminas de los diputados de todos los grupos parlamentarios en la página web de la Asamblea. De momento, solo los ocho diputados de UPyD las hicieron públicas mucho antes de aprobarse la iniciativa que ellos mismos presentaron.

Las plantillas de las Fuerzas Armadas caen por debajo del mínimo legal de 2007

MADRID.- España gastará en 2014 un tercio menos en Defensa que cuando empezó la crisis. Los recortes en los Presupuestos Generales del Estado para 2014 son menores (un 3%) comparados con los dos ejercicios precedentes, pero en el caso del Ministerio de Defensa llueve sobre mojado y se acumulan a los drásticos ajustes que empezaron en 2009. El número total de militares de tropa y marinería queda por debajo del mínimo de los 80.000 establecido en la ley de la carrera militar de 2007 que fue pactada entre el Gobierno socialista y el PP en la oposición.

El proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado fija para el próximo año un tope de 79.000 militares de tropa y marinería, mil menos que en este ejercicio, con lo que las Fuerzas Armadas volverán a las cifras de personal de 2008, cuando Defensa empezó a superar el bache de reclutamiento experimentado desde el final del servicio militar obligatorio.
En 2005 las Fuerzas Armadas se habían quedado en los 70.000 soldados y marineros, con los que no podían cubrir los mínimos operativos de muchas unidades y barcos. La ley de la carrera militar fijó en 2007 el objetivo de contar con 150.000 profesionales entre generales, jefes, oficiales, suboficiales y tropa (entre 80.000 y 90.000 soldados y marineros).
La nueva ley que ofrecía una carrera a los jóvenes, las subidas salariales, más el principio de la crisis solucionaron el problema y en 2010 las Fuerzas Armadas llegaron a contar con 86.000 efectivos de tropa. Los recortes presupuestarios a partir de ese mismo ejercicio culminan para el próximo año con la cifra de personal eventual (soldados y marineros) más baja de los últimos seis años y aumenta la desproporción con el número de mandos, que ahora está en los 44.000 (casi 16.000 oficiales y 28.000 suboficiales).
Lo que arregló la ley de la carrera militar en dos años se lo ha llevado la crisis vía recortes presupuestarios en menos de tres ejercicios. En la última convocatoria realizada por el Defensa este verano para cubrir 1.500 plazas de soldados y marineros, se presentaron 14.000 aspirantes.
Los recortes en Defensa se limitan este año a un 3,2 por ciento sobre el ejercicio en curso, pero al ser el quinto presupuesto que disminuye, el departamento que dirige Pedro Morenés figura entre los más castigados por los ajustes. De los 8.491 millones con que contó Carme Chacón en 2008 se ha pasado a los 5.745 para 2014.
El Ministerio de Defensa, uno de los que contaban tradicionalmente con un capítulo más abultado de inversiones, se constriñe aún más al mero sostenimiento del personal: un 77 por ciento del presupuesto está dirigido a pagar las nóminas. Las inversiones vuelven a bajar, esta vez sólo un 8,7 por ciento, hasta quedarse en los 443 millones de euros; aunque lo hace bastante menos que el pasado año, cuando descendieron un 30 por ciento.
Siguen bajo mínimos los pagos dirigidos a los programas especiales de modernización de las Fuerzas Armadas después de la reprogramación de compras y contratos: 4,9 millones para el caza Eurofighter, 1,1 millones para el avión de transporte militar A400M y 730.000 euros para el helicóptero de combate Tigre.
A mitad de este ejercicio, el Gobierno tuvo que habilitar un crédito extraordinario de 877 millones de euros para pagar las deudas acumuladas con la industria de Defensa en los últimos años. En 2010 y 2011 el Ejecutivo anterior no había abonado factura alguna, según recoge 'El Confidencial'.