MADRID.- Unas 130 personas del mundo de la cultura y la educación han suscrito  un manifiesto en el que muestran su "más rotundo rechazo" a las  instrucciones dadas por la Consejería de Educación y Empleo para este  nuevo curso escolar y su solidaridad con "la comunidad educativa  afectada del sector público en Madrid", apoyando sus movilizaciones.
 
   En este escrito, que ha sido presentado este lunes en el Ateneo de  Madrid, figuran nombres como el de Almudena Grandes, Juan José Millás,  José Luis Sampedro, Benjamín Prado, Joaquín Sabina o Miguel Ríos, en una  lista que encabeza el poeta y catedrático de la Universidad de Granada  Luis García Montero.
 
   Subrayando que "la educación y la cultura no deben ser realidades  separadas" al ser ambas "la garantía de una sociedad plural,  democrática, participativa y crítica, y por ende libre", han señalado su  preocupación por "el modelo que quiere imponer el Gobierno regional",  que, a su juicio, "tiende a crear guetos y a profundizar la brecha de  las desigualdades económicas y sociales".
 
   Además de criticar los recortes de la Comunidad de Madrid, han  precisado que esta "decisión impulsada por la consejera Lucía Figar, sin  tener en cuenta la opinión de los sectores afectados, no va  precisamente en apoyo de la calidad de la enseñanza y desde luego dista  mucho de esa excelencia en educación que reclama para sí la Consejería".
 
   Por otra parte, en el manifiesto se asevera que "mientras el  Gobierno de la Comunidad malgasta el dinero en costosas e inútiles  campañas publicitarias de fomento del respeto al profesor, con medidas  como estas demuestra todo su desprecio a la meritoria labor que llevan a  cabo los docentes que trabajan en la escuela pública así como su  alumnado".
 
   "La mejor forma de garantizar el respeto a los profesores es  dotarles de los medios necesarios y asegurarles unas condiciones dignas  de trabajo", han considerado en el escrito, que concluye pidiendo "una  educación pública de calidad y de verdadera excelencia de todos y para  todos".
  
   Según los firmantes, estos recortes se ejecutan "con la excusa de  la crisis", una idea que ha sido redundada por la escritora Almudena  Grandes durante la presentación del manifiesto, donde ha intervenido  como "madre de la pública" y ha explicado que cursando su hija Primaria  ya había "desaparecido el profesorado de apoyo".
 
   Asimismo, ha considerado que el recorte presupuestario es en  realidad un "problema ideológico" y una "falta de respeto". "Pero no de  falta de previsión, sino de la aplicación de un programa ideológico que  pretende destruir los valores que la educación pública representa", ha  sostenido.
 
   Uno de los ejemplos de esta "falta de respeto" es, según Grandes,  el hecho de que una empresa de limpieza pueda encargarse de la gestión  de escuelas infantiles. La escritora realizaba esta valoración tras  conocer de mano de una asistente el hecho de que en cinco centros  educativos iban a dar clase profesores sin haber pasado una oposición,  pertenecientes a una fundación "de corte neoliberal".
 
   También ha asistido al acto el presidente de la FAPA Giner de los  Ríos, José Luis Pazos, que ha agradecido a los firmantes el apoyo a la  comunidad educativa y ha señalado que "esto no es una pelea de los  profesores contra la Administración, sino de la Administración contra la  sociedad", al tiempo que ha asegurado que al conocer "las  consecuencias" que tendrían estas instrucciones, en realidad la posible  huelga en la enseñanza madrileña está en realidad "convocada por la  Consejería".
  
   Otro de los apoyos del manifiesto ha sido el de las centrales  sindicales, con la presencia en el acto del secretario general de CC.OO.  de Madrid, Javier López, y de UGT-Madrid, José Ricardo Martínez. Este  último esperaba que el Gobierno regional "rectifique" ante estas  medidas, y ha asegurado la "continuidad" de las movilizaciones en este  sentido.
 
   Asimismo, ha recordado a la consejera de Educación que "los  interinos también son profesores", ya que Figar ha dicho este lunes que  gran parte de las personas que estaban presentes en las movilizaciones  de la semana no eran funcionarios docentes sino interinos.
 
   Por su parte, López ha pedido a la Comunidad que "reconsidere de  inmediato" las instrucciones y ha dicho que en tiempo de crisis "si algo  hay que salvar de la quema son cosas como el sistema sanitario, el  educativo o los servicios sociales para los más débiles".
    "Deberían ser cosas que cualquier gobernante tendría claro. Pero  en el PP y especialmente Esperanza Aguirre están envalentonados, se les  están subiendo los humos, y han empezado a tirar por la borda aquello  que debería ser intocable", ha concluido.