MADRID.- Más de 29.600 estudiantes de la Comunidad de
Madrid se presentarán esta semana, los días 5, 6 y 7 de junio a la
prueba de acceso a la Universidad en las seis universidades públicas de
la región, cifra superior a la del año pasado, cuando se presentaron
unos 28.000 alumnos, según datos suministrados por los centros
universitarios.
Es el tercer año que se celebra la prueba con la parte
general, obligatoria, y otra específica, voluntaria, que podrán hacer
todos aquellos alumnos que quieran mejorar su nota de admisión a los
estudios universitarios de Grado. Además, se hace en el contexto de
protesta de universidades y alumnos por el incremento de las tasas
universitarias.
Los estudiantes, que ya han realizado la preinscripción para
las pruebas de acceso a la universidad, optarán a las más de 43.000
plazas que se ofrecerán en la Comunidad de Madrid en el curso 2012-2013.
Estas plazas se ofertan también para alumnos de otras regiones,
titulados y estudiantes procedentes de FP.
Así, la Universidad Complutense de Madrid es la que más
alumnos acoge, con 10.527; en la Universidad Autónoma de Madrid se
examinarán 8.173 estudiantes; en la Carlos III de Madrid, 3.613; en la
Universidad de Alcalá de Henares, un total de 3.556; en la Rey Juan
Carlos, un total de 2.565; y en la Politécnica, 1.191.
Para el próximo curso, con todas las titulaciones adaptadas al
Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) las universidades
madrileñas ofrecen más de 43.500 plazas, lideradas por la Complutense,
con más de 17.000 plazas; seguida de la Autónoma, con 5.992; la Carlos
III, con más de 3.000; la Rey Juan Carlos, con 7.240; la Politécnica,
con 5.910; y la Universidad de Alcalá, con 3.770 plazas.
El anonimato de la prueba de acceso a estudios universitarios
está garantizado a través de un sistema de códigos de barras que se
utiliza para identificar las pruebas y que evita cualquier error en el
procedimiento informático de las calificaciones. Este sistema es común
para las seis universidades públicas del distrito único de Madrid.
La selectividad se divide en dos fases. La primera, la llamada
'fase general', que, igual que hasta ahora, el alumno se examinará de
las materias comunes de segundo de Bachillerato --Lengua castellana,
Literatura, Lengua extranjera, Historia o Filosofía y de la Lengua
cooficial, en función de la comunidad autónoma--. Además, se une a esta
prueba general un examen de una asignatura de modalidad elegida por cada
estudiante.
La segunda fase, denominada 'específica', es voluntaria. Aquí,
el alumno que quiera competir por una plaza en una titulación en la que
prevé que haya más demanda que oferta, tendrá la oportunidad de mejorar
su nota examinándose de cualquiera de las materias de modalidad de
segundo de Bachillerato, que tiene que ser distinta a la elegida en la
'fase general'.
De esta manera, con la nota de la primera fase, un estudiante
podrá acceder a cualquier carrera que tenga plazas, pero si de lo
contrario éstas son insuficientes y hay más demanda que oferta, la
admisión se hará como hasta ahora por orden de nota de admisión. Además,
la nota que se obtenga en la fase específica voluntaria caducará a los
dos años.
La nueva PAU se realizó por primera vez en el año 2010 y
actualizaba un sistema que llevaba 20 años en vigor y que se adaptaba a
los nuevos tiempos: al Espacio Europeo de Educación Superior, a la
importancia de los idiomas y al aumento de la oferta de las
universidades, entre otras cosas.
Así, los exámenes comenzarán el martes a las 10 horas, con los
ejercicios de la fase general: el comentario de un texto de Lengua
Castellana y Literatura, Historia de España o Historia de la Filosofía,
y, por último, la lengua extranjera, con la idea de que las pruebas
terminen alrededor de los 18 horas.
El miércoles también acogerá un cuarto ejercicio de la fase
general, con una materia de modalidad de 2ª Bachillerato, y otras dos
pruebas para la parte específica: por un lado, Ciencias de la tierra y
medioambientales, Diseño, Eletrotecnia, Matemáticas Aplicadas a las
Ciencias Sociales II.
A lo largo de este día también están la prueba específica para
las asignaturas de Física, Literatura Universal, Técnicas de expresión
gráfico-plástica, Geografía, Matemáticas II y Dibujo Artístico II. Los
exámenes terminarán sobre las 18 horas.
El último día, el jueves, continuará la fase específica. Por
la mañana, a primera hora, será el turno para Latín II, Química e
Historia de la música y de la danza y Economía de la Empresa; a las
12.15 horas, Análisis musical II, Biología, Historia del Arte y
tecnología Industrial II; y por la tarde, Dibujo Técnico II, Griego II y
Lenguaje y Práctica musical.
Las universidades recuerdan a los estudiantes que deberán
estar en las sedes de los exámenes al menos un cuarto de hora antes de
las pruebas y que deberán presentar el DNI para acceder al aula.
Las notas saldrán publicadas el 21 de junio a partir de las 7
horas en Internet. Los estudiantes podrán reclamar sus notas durante los
días 22, 25 y 26 de junio a través de dos procedimientos: la doble
corrección, que puede subir o bajar la nota, o la reclamación simple,
donde sólo se puede mantener o subir la puntuación.
La entrega de las calificaciones después de reclamaciones será
para el 6 de julio y la reclamación a la segunda corrección, para los
días 9, 10 y 11 de julio. El periodo de preinscripción será del 13 de
junio al 3 de julio. El plazo excepcional para estudiantes de sistemas
educativos extranjeros será del 13 de junio al 12 de julio y la
publicación de listados de admitidos, el 18 de julio.
Los estudios de Traducción e Interpretación y el Derecho
mención y francés tendrá plazos especiales. La solicitud de ingresos y
de examen para las pruebas específicas será del 13 al 26 de junio y la
lista de admitidos saldrá el 27. Los listados definitivos se publicarán
el 4 de julio.
La prueba de acceso tiene por finalidad valorar, con carácter
objetivo, la madurez académica del estudiante, así como los
conocimientos y capacidades adquiridos en el Bachillerato y su capacidad
para seguir con éxito las enseñanzas universitarias oficiales de Grado.
A la hora de corregir, según ha establecido la Comisión
Interuniversitaria, se tendrá en cuenta la propiedad del vocabulario, la
corrección sintáctica, la corrección ortográfica (Grafías y tildes), la
puntuación apropiada y la adecuada presentación.
Los exámenes son corregidos por profesores especialistas de
cada materia, de forma anónima (el corrector no sabe a qué estudiante
corrige ni a qué centro pertenece), en un plazo máximo de cinco días. La
asignación de los ejercicios, que no superará un máximo de 200 por
corrector, se hace de forma centralizada desde el Vicerrectorado de
Estudiantes.