MADRID.- La Comunidad de Madrid ha "aparcado" su intención de poner peaje de manera genérica en las autovías madrileñas por su "difícil aplicación técnica", según ha avanzado este jueves el consejero de Presidencia y Justicia y portavoz del Gobierno madrileño, Salvador Victoria.
"Fue un proyecto que se estudió y que no tiene fácil aplicación
técnica", ha señalado Victoria en rueda de prensa posterior al Consejo
de Gobierno, donde ha destacado el "esfuerzo" en mantenimiento y
conservación de carreteras que hace la Comunidad de Madrid anualmente y
que, este año, por ejemplo, se han destinado 65 millones de euros.
Preguntado por el anuncio que hizo la ex presidenta de la
Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre sobre su intención de poner peaje
en las autovías madrileñas con el fin de compensar los gastos, Victoria
ha señalado que "lo que se estudió en su día" era la "posibilidad" de
que los ciudadanos pagaran peajes en determinadas carreteras.
"Ese proyecto de peaje era una simple iniciativa de complicada
aplicación y de momento está aparcada por difícil aplicación técnica",
ha sostenido Victoria, tras ser repreguntado por si el proyecto quedaba
paralizado de momento.
Cuando se informó de este estudio, la Consejería de Transportes e
Infraestructuras explicó que las carreteras madrileñas susceptibles de
peaje eran las que más tráfico tienen, entre ellas, la M-45, construida
en el año 1999 y financiada con el peaje en la sombra, con casi 35
kilómetros de longitud.
Aguirre, de hecho, llegó a anunciar que el sistema que se iba a
implantar sería el del telepeaje, todo ello, según insistían desde el
Gobierno regional, para obtener ingresos para el mantenimiento de las
carreteras.
Aguirre también afirmó que afectaría a las autovías y que se
descartaban las carreteras que no contaban con una alternativa. En
cuanto a la cantidad que se iba a cobrar a los conductores, explicó que
dependería de lo que estableciera la empresa a la que se licitara el
proyecto del peaje y que no habría diferencias entre hora punta y valle.
Precisamente, este jueves el consejero de Transportes,
Infraestructuras y Vivienda, Pablo Cavero, ha presentado en el Consejo
de Gobierno un informe en el que se explica que la Comunidad de Madrid
tiene en ejecución desde comienzos de verano obras de conservación de
carreteras por valor de 12,8 millones de euros, que están permitiendo
mejorar la seguridad vial en 17 tramos de 15 carreteras de la red
regional.
Según ha explicado Victoria, los trabajos que ya están finalizados
suman una inversión de 5,5 millones de euros, mientras que los que se
han iniciado y continúan en curso cuentan con un presupuesto de 7,3
millones de euros.
Todos estos trabajos, ha señalado, persiguen el objetivo de
"garantizar la seguridad vial de los conductores", para lo cual la
Comunidad de Madrid invierte más de 65 millones de euros cada año
ejecutando labores de asfaltado, desbroce de los arcenes, mejora de
cruces o travesías urbanas y la colocación de pasarelas peatonales,
"buscando también la seguridad de los vecinos".
Victoria ha indicado que dentro de los trabajos que el Gobierno
regional realiza a lo largo del año para garantizar el correcto
mantenimiento de las carreteras de su competencia, hay determinadas
obras que se realizan tradicionalmente en verano, por varios motivos,
entre otros, el descenso de más del 25 por ciento del tráfico en muchas
carreteras, que facilita las tareas y minimiza las molestias a los
usuarios.
Además, la realización de algunas labores como el refuerzo de
firme requiere una temperatura mínima, por lo que este periodo es el más
adecuado. Asimismo, hay trabajos como la limpieza de calzadas y
márgenes, entre los que se encuentran las podas y el desbroce de la
vegetación cercana a la carretera que resultan fundamentales tanto para
garantizar la seguridad vial como para evitar otros riesgos asociados a
las altas temperaturas, fundamentalmente el riesgo de incendios.
En la actualidad, la Comunidad de Madrid invierte en conservación
de carreteras más de 25.000 euros por kilómetro. El 59 por ciento del
presupuesto de mantenimiento se destina a trabajos de conservación
ordinaria, el 26,2 por ciento a refuerzos de firme y el 14,8 por ciento a
trabajos de mejora de la seguridad vial.
Para la planificación de las actuaciones, el Gobierno regional
tiene en cuenta aquellos puntos en los que es necesario actuar siguiendo
criterios como el volumen de tráfico, para lo que realiza un
seguimiento constante del estado de la red de carreteras.
Este verano se ha actuado en 15 carreteras, en 17 tramos que suman
una longitud de aproximadamente 48 kilómetros. De estas actuaciones
diez se han ejecutado totalmente y siete se han iniciado.