MADRID.- La presidenta de la Comunidad de Madrid,
Esperanza Aguirre, ha destacado en su discurso durante el Debate del
Estado de la Región las muchas medidas que ha tomado y que tomará, pero
también ha explicado que otras tantas no dependen de la autoridad
autonómica, así como queriendo apuntillar lo que considera como el
principal escollo para el crecimiento español, la deuda pública y
privada. "Es el plomo en las alas de la economía española", sentenció.
Aguirre comenzó su discurso centrándose en los grandes debates
nacionales y pidiendo a todos, ciudadanos y políticos, que remen en la
misma dirección tras considerar que la explicación "de lo que pasa es
clara".
"Hasta los más legos entendemos lo que pasa. Hemos gastado más
de lo que teníamos y ahora no nos prestan y cuando nos prestan nos
cobran interés tan altos que estamos comprometiendo el futuro de
nuestros hijos y hasta el de nuestros nietos", apostilló.
Para la presidenta madrileña, las entidades "facilitaron los
créditos hasta un punto que ahora se ha visto que era insensato".
"Hasta
ese punto los particulares y las empresas y el Estado se endeudaron.
¡Con la mejor de las intenciones! La de prestar servicios. Pero el
Estado ha gastado mucho más de lo que ingresaba. Todos, Gobierno
central, comunidades y muchos ayuntamientos", ha expuesto.
Aguirre lo tiene claro, no recortar esa deuda es un "obstáculo
para crear empresas y puestos de trabajo". En este sentido, dijo que le
sorprendía la supuesta superioridad moral que se arrojan aquellos (la
izquierda) que "han gastado a manos llegas el dinero de sus hijos y
hasta de sus nietos".
"¿Donde está esa superioridad moral? ¿En dejar una deuda pública
que se ha duplicado en los últimos cuatro años, en dejar a uno de cada
dos jóvenes sin trabajo?", se preguntó. Así, arremetió contra los
políticos "socialistas y comunistas" a "los que hay que decir" que
fueron ellos "los que llevaron a la enfermedad".
"Hay que ser enemigos
de los que no se atreven a decir que debemos abrocharnos el cinturón
porque los que más se quejan ahora son los que nos han llevado hasta
donde estamos ahora!, continuó.
A colación salieron también algunas de las medidas de mayor
impacto pero también más polémicas del anterior Gobierno socialista,
como el Plan E, que para Aguirre "dilapidó 13.000 millones de euros en
obras absurdas que ahora serían oxígeno puro para las deterioradas arcas
públicas".
Pero la 'popular' detuvo pronto la crítica dejando claro que ahora
a los ciudadanos les da mucho más igual quién tiene la culpa como que
entre todos se encuentre la solución. Asimismo, reconoció que "hay un
hartazgo" social hacia los políticos en general consecuencia de que la
ciudadanía ve a menudo dos grandes defectos en ellos: no decir la verdad
y que no se apreten el cinturón tanto como piden a los demás que lo
hagan. "Eso no lo soportan los ciudadanos", aseveró.
"En 29 años en política puedo decir que he cometido muchos
errores, que he metido la pata bastantes veces, he tenido declaraciones
más o menos acertadas" -explicó-- "pero en escasísimas ocasiones por no
decir en ninguna que yo recuerde he dicho algo que crea que no sea
verdad. Así que por eso creo que estoy en una buena situación para sin
eufemismos decir cuales son las finanzas de la Comunidad. Es verdad que
la situación es muy grave, pero también digo que si hacemos las cosas
entre todos bien, salimos de esta", garantizó.
Y continuó con su análisis: del paro, que quien diga resolverlo en
un instante es "o un ignorante o un pretencioso", pero que igualmente
hay datos que arrojan "síntomas de recuperación". Como que "se ha creado
empleo neto", que hay "más personas trabajando" y que el numero de
empresas desde enero ha crecido en casi 10.000. "Estos datos son verdad
no son palabrería política", incidió.
Además, la presidenta madrileña no se echa atrás en algunas de sus
más recientes propuestas. Mantiene la necesidad de "una revisión del
Estado autonómico" por varios motivos. Uno, que se creó para dar salida a
los "problemas" catalán y vasco "que siguen más vivos que nunca"; y una
segunda porque pese a alguna cosa buena se han creado "17 gobiernos que
han complicado innecesariamente el funcionamiento de servicios
esenciales para los ciudadanos".
"Los defectos son evidentes. España necesita menos estructuras,
necesita un estado fuerte y eficaz capaz de hacer las tareas que le son
propias", apuntó.
Para empezar, insiste en reducir a la mitad el número de diputados
en su Asamblea, la de Madrid, suprimir instituciones y reducir el
número de políticos y, en general, lanzar una "revisión a fondo" de la
estructura pública.
Un defecto del Estado, ha comentado, ha sido el de intentar
"alcanzar las aspiraciones de todos los ciudadanos". "Una cosa es que el
Estado provea de los medios necesarios para cubrir para todos,
perfeccionar los sistemas sanitarios y educativos, y otra que se arrogue
en exclusiva otra serie de competencias. Pido a los ciudadanos que
recuperen el sentido de la responsabilidad de muchas cosas que habían
dejado en manos de los poderes públicos", argumentó.
Para la 'popular', el "mejor camino es dar el protagonismo a los
ciudadanos", algo que centró como el "eje" de su política económica
basada en "gastar sólo en la medida que se ingresa, la bajada y no subir
impuestos cuando sea posible, y un marco que favorezca la inversión
privada".
"Hemos gastado de más y estamos haciendo lo posible por que no
vuelva a ocurrir. Nuestra política es detraer los mínimos recursos y
manejarlos con el máximo respeto", dijo.
En materia educativa, dice que el modelo dual aplicado en Madrid
no deviene de otra cosa que de "observar aquellos países a los que les
va mejor y actuar". Y el sistema dual es aplicar lo que lleva "más de
100 años funcionando en Alemania".
"Estamos decididos por la importancia
de aprender idiomas. Y si usted no habla inglés señoría...", dijo
mirando a la bancada socialista donde estaba el líder del PSM, Tomás
Gómez.
Uno de los momentos más delicados de la jornada fue la
notificación del fallecimiento de Nieves García, diputada 'popular'. La
presidenta fue notificada por escrito. Pareció entender lo que pasaba,
pero se fue a su bancada a buscar las gafas, volvió, lo leyó de nuevo y
notificó al pleno lo ocurrido. A continuación no sabía cómo continuar,
pero lo hizo.
Fuentes del Gobierno regional
explicaron posteriormente que lo que faltaba de intervención era
sensiblemente más de lo que finalmente Aguirre pronunció, pero que había
resultado muy afectada por la noticia. Ella mismo en el atril reconoció
haber hablado recientemente con ella pero desconocer que su situación
(un cáncer) pudiera desembocar así de manera tan repentina.
Por otra parte, el único murmullo se sintió cuando recordó en la
misma frase a la cooperante secuestrada en Somalia, Blanca Thiebaut, y a
Ángel Carromero apresado por "la dictadura castrista". "Quiera Dios que
pronto estén los dos entre nosotros". Y fue eso lo que provocó la doble
respuesta de abucheos socialistas y aplausos populares.
Aguirre también aprovechó para resaltar que esta cita
parlamentaria se inicia un 11 de septiembre, "una fecha que desde 2001
siempre estará marcada por los atentados del terrorismo que Al Qaeda
perpetró en Estados Unidos". Para la presidenta fue un "ataque contra la
Nación que mejor representa los valores de la civilización occidental".
A su juicio, recordar a las víctimas "es la mejor manera de defender
los valores en los que se basa la cultura, el sistema político y la
convivencia".