MADRID.- El Plan de Lucha contra el Fraude de la
Comunidad de Madrid ha hecho aflorar en 2012 una deuda no declarada de
545,9 millones de euros, lo que representa el 34 por ciento de la
recaudación por los impuestos gestionados por la Administración
autonómica, según los datos anunciados este martes por el consejero de
Economía y Hacienda, Enrique Ossorio.
En concreto, los impuestos que gestiona la Comunidad de Madrid son
Transmisiones Patrimoniales, Actos Jurídicos Documentados, Imposición
sobre el Juego y Sucesiones y Donaciones, por los que ha recaudado en
2012 un total de 1.591 millones de euros.
El número de deudas descubiertas ha sido 61.840, por lo que han
aumentado casi un 5 por ciento respecto a 2011, ha apuntado Ossorio,
quien también ha indicado que esta es la mayor cantidad de deudas
descubiertas en un ejercicio desde 2003.
Transmisiones Patrimoniales es el impuesto donde se han
descubierto un mayor número de deudas, con 31.281, un 2,6 por ciento más
que en 2011. Sin embargo, por importe la mayor deuda descubierta
corresponde al de Sucesiones y Donaciones, con 341,1 millones de euros,
un 62,48 por ciento de toda la deuda descubierta.
En cuanto al número de deudas descubiertas, 12.191 corresponde al
impuesto de Sucesiones y Donaciones (un 11% menos que en 2011); 11.996
al de Actos Jurídicos Documentados (un 8% más que en 2011), 1.015 al del
juego (casi un 5% más que en 2011) y 5.357 a otros (sanciones,
intereses, etc.).
Respecto al importe de deuda, por el impuesto de Transmisiones
Patrimoniales se ha descubierto un importe de deuda de 73,6 millones de
euros (13,48% del total); 64,8 millones de euros (11,87%), por el de
Actos Jurídicos Documentados; 29,8 millones de euros (5,46%), por el
del juego, y 36,6 millones de euros (6,70%) por otros.
Por otra parte, el importe medio de las deudas correspondientes a
la Imposición sobre el Juego es el más elevado, situándose en 29.359
euros. La deuda media del total ha sido de 8.827 euros.
El importe medio de las deudas asciende a 27.979 euros en
Sucesiones y Donaciones; 5.401 euros en Actos Jurídicos Documentados;
2.352 euros en Transmisiones Patrimoniales, y 6.832 euros en otros.
El porcentaje de la deuda descubierta respecto a la recaudación,
que se ha situado en el 34 por ciento, ha crecido mucho en los últimos
años. Así, ha pasado de suponer el 7 por ciento en 2006, al 11 por
ciento en 2007, 15 por ciento en 2008, 18 por ciento en 2009, 26 por
ciento en 2010, hasta el 34 por ciento en 2011 y 2012.
El importe aflorado durante los últimos 10 años de inspección
fiscal, previamente evadido, que asciende a 4.680 millones de euros es
una cifra equivalente a la subvención de más de una legislatura al
usuario del transporte público (aproximadamente unos 1.000 millones al
año es esa subvención) o a un conjunto de 12 hospitales y 35 kilómetros
de metro y representa un 27,5 por ciento del presupuesto de la Comunidad
de Madrid.
Ossorio ha explicado que este aumento se debe a los esfuerzos de
la Comunidad de Madrid en la lucha contra el fraude fiscal, pero
también, en gran parte, a la reducción de la recaudación como
consecuencia de la crisis económica, sobre todo, a partir de 2008.
Además, el consejero ha defendido la eficiencia de la gestión
tributaria sobre la base de que el coste de recaudar 100 euros ha sido
de 2,35 euros, así como de que el beneficio de las actuaciones de
control del fraude, es decir, la diferencia entre los ingresos obtenido
por actuaciones de control y el coste para la administración tributaria
ha sido de 478 millones de euros.
Se ha referido también a que los ingresos por cada empleado de la
Dirección General de Tributos han alcanzado un ratio de 2,83 millones de
euros.
Asimismo, ha defendido la política fiscal de la Comunidad de
Madrid, basada en establecer "impuestos bajos" y "facilidades" a la
hora de pagarlos, junto a la "lucha contra el fraude". Todo ello,
constituye "una prioridad para el Gobierno regional".
Según Ossorio, la política de la "rebaja selectiva" de impuestos
ha hecho posible que la Comunidad de Madrid recaude más que otras
regiones.