MADRID.- Lo primero en salir a la luz tras las elecciones autonómicas y municipales de mayo fue el agujero económico generalizado en los ayuntamientos . Después, la inventiva política para intentar taparlos mediante impuestos nuevos y tasas más altas. Y ahora se empiezan a descubrir los principales despilfarros de los Consistorios.
Es el caso de Parla: el antiguo bastión de Tomás Gómez comienza a desmoronarse con la necesidad de despedir a 100 funcionarios para cuadrar sus cuentas . Sin embargo, el ex alcalde no se privó de inflar sueldos cuando había dinero en la hucha. Así, según ha desvelado El Confidencial, el nuevo alcalde ha heredado una plantilla con unos sueldos que, de media (entre 55.000 y 65.000) superan el suyo (50.276,52 euros). Mirando al detalle, nos encontramos con un trabajador social que gana 64.705 euros, psicólogos contratados por 61.600 euros y técnicos informáticos por 71.354 euros. Casi nada.
El derroche también existe en Madrid capital, donde su alcalde, Alberto Ruiz Gallardón, no tiene suficiente con tener un mayordomo desde 2003 a costa de las arcas públicas, sino que se ha rodeado de ocho secretarias, cuyo sueldo total asciende a los 283.368 euros anuales. Eso por no hablar de los vehículos oficiales. ¿Te acuerdas del coche del presidente del Parlament catalán Ernest Benach (ERC) ? Te refrescamos la memoria: Nos referimos a un 'Audi A-8 Limusina', cuyo coste asciende a 110.000 euros.
Uno de precio similar usaba Pedro Castro (PSOE) como alcalde de Getafe. El ya ex alcalde, además, se marchó del Consistorio licitando dos contratos que ascienden a 3.957.540 euros el mismo día en el que se constituyeron los ayuntamientos .
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