miércoles, 14 de septiembre de 2011

Sindicalistas de UCM y la Politécnica critican la "manipulación" de sindicatos educativos en polémica sobre los recortes

MADRID.- Las secciones Sindicales del Sindicato de la Administración Pública (SAP) en la Universidad Complutense (UCM) y en la Politécnica han criticado este miércoles la "manipulación de las personas" y la "tergiversación de los hechos" que están llevando a cabo los sindicatos educativos, "palmeros del Gobierno", que luchan contra las instrucciones del principio de curso educativo.

   Según han señalado en un comunicado, esta "medida de presión tiene un trasfondo político" y es "insolidaria con el resto de los trabajadores, manipuladora con los alumnos y sus padres a quienes trata de utilizar de rehenes".
   Además, consideran que es "absolutamente corporativa pues trata de mantener un estatus privilegiado pasando de los millones de parados, de los trabajadores que aún conservan su trabajo y que no pueden dejarlo para cuidar de sus hijos durante la huelga, y de la formación de sus alumnos a quienes desprecian e ignoran, así como del resto de los funcionarios públicos que sí cumplen, pese a los recortes y congelación salarial, con sus jornadas de trabajo y a los que no sólo no se les compensa el esfuerzo, sino que este gobierno se dispone a detraer unos euros más de sus bolsillos".
   El Sindicato de la Administración Pública (SAP) cree que son los interinos "el colectivo verdaderamente afectado" y sostiene que "los funcionarios de carrera no se implican directamente en la defensa de estos trabajadores luchando por su consolidación, sino que defienden sus situaciones de privilegio".
   Desde el SAP denuncian la "sectaria e interesada actitud de los sindicatos de la Enseñanza al servicio del Gobierno que quieren insolidariamente seguir manteniendo sus privilegios y subvenciones a costa de la inmensa mayoría de los trabajadores" y consideran que "es preciso dejar claro que los sindicatos mienten y tergiversan cuando exponen los hechos y extraen las consecuencias que les conviene, amparándose como siempre en conceptos que ellos incumplen constantemente, como son: solidaridad, equidad y justicia".
   Así, exponen que los docentes de la Comunidad desarrollan una  jornada de 37,5 horas semanales, que se divide en unas horas lectivas, que según la norma "pueden oscilar entre las 18 horas" y en concreto, "en la Comunidad los docentes imparten 18 horas semanales"; y el resto se debe dedicar a tutorías.
   "En el caso de la Comunidad de Madrid, con 18 horas lectivas, se trata de 19,5 horas semanales que cada docente dedica en teoría a los citados menesteres, en muchos casos sin control efectivo alguno por parte del Centro", añaden y destacan que la propuesta del Ejecutivo regional propone que impartan 20 horas semanales de docencia "con lo que les quedarían 17,5 horas semanales para tutorías, etc."
   Además, la propuesta incluye "compensar económicamente este tiempo que se encuentra incluido en la jornada laboral circunstancia que el sindicato entiende, carece (y más en estos tiempos), de justificación alguna".
   Así, consideran que se incrementa la docencia efectiva a los alumnos, se dedican 70 horas mensuales a tutorías, entrevistas con los padres de los alumnos, autoformación, etc., por lo que teniendo en cuenta que en la Comunidad de Madrid se da una media de 9.3 alumnos por profesor resulta evidente que pueden realizarse tutorías y el resto de actuaciones del profesor con auténtica comodidad".

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