MADRID.- Los alcaldes de los municipios de Torrejón de Ardoz, Pedro Rollán; Algete, Inmaculada Juárez, San Sebastián de los Reyes, Miguel Ángel Fernández; Coslada, Raúl López; El Molar, Emilio de Frutos; y el alcalde de Tres Cantos, José Folgado, se han reunido este viernes y han firmado una declaración conjunta en la que, entre otras cosas, piden el cierre nocturno del aeropuerto de Barajas.
Los primeros ediles han estudiado las consecuencias de la disminuación de la distancia mínima entre aviones en ruta de 5 a 2,5 millas y han puesto de manifiesto que la primera de ellas ha sido "una mayor frecuencia de sobrevuelos por las poblaciones ya afectadas sin que se hayan racionalizado las trayectorias".
Tras la reunión mantenida, en el citado documento conjunto, han pedido el "cierre nocturno del aeropuerto Madrid-Barajas entre las 0 y las 6 horas intensificando los periodos de 23 a 0 horas y de 6 a 7 horas" ya que, a su entender, "de este modo, se garantizaría el derecho al descanso de los vecinos al menos 6 horas por noche".
Solicitan también la "intensificación de las trayectorias que no sobrevuelan poblaciones, liberando así las que sí lo hacen" y "una reunión urgente con el presidente de AENA y el Ministerio de Medio Ambiente y Fomento, así como una convocatoria urgente tanto de la CSAM como de la Comisión Mixta de Servidumbres Acústicas para que los ayuntamientos sean informados y consultados sobre las medidas que se van a llevar a cabo".
En dicho documento piden asimismo "la revisión de la declaración de impacto ambiental tras el incremento de vuelos ya que la que está vigente fue aprobada en 1999 dentro del Plan Director de Barajas con un número inferior de operaciones".
"La declaración de impacto ambiental, condición indispensable para autorizar la construcción de la ampliación del aeropuerto, se basa en un número máximo de vuelos diarios, que no puede ahora ser excedido en beneficio único de AENA aeropuertos", han dicho.
Seguidamente, han solicitado que se "compense a los municipios afectados con medidas económicas y que AENA sufrague las diferentes actuaciones que logren aislar del ruido las viviendas que sufren el paso continuo de los aviones".
Por último, los municipios afectados por el ruido de Barajas han expresado que se sienten "indefensos" tras la entrada en vigor de la Orden Ministerial de 2010 que "restringe considerablemente la capacidad de los Ayuntamientos de imponer sanciones a las compañías aéreas".
Tras la entrada en vigor de la nueva separación mínima entre aeronaves el pasado 22 de septiembre, el aeropuerto de Madrid-Barajas ha asegurado en repetidas ocasiones que "la nueva separación mínima entre aeronaves no afecta a los sobrevuelos en poblaciones cercanas" al aeródromo.
Según Barajas, "la medida afecta a las aeronaves en la fase de ruta, en la que la distancia se reduce de 8 a 5 millas".
"Esta fase del vuelo se produce a más de 24.000 pies de altitud (aproximadamente 8 kilómetros) y, por tanto, no tiene ningún impacto sobre las poblaciones", han asegurado fuentes del aeropuerto.
"En el caso de Madrid-Barajas, la separación entre aviones en un radio de 54 kilómetros alrededor del Aeropuerto es de 3 millas, la misma que había antes, y, entre los 54 y 108 kilómetros, fuera del radio que podría afectar a poblaciones cercanas al aeropuerto, la distancia es ahora también de 3 millas".
Según este comunicado, "Madrid-Barajas no ha aumentado su capacidad de operaciones en la aproximación al aeropuerto, es decir, la capacidad de salidas y llegadas es la misma que antes (50 salidas y 48 llegadas/hora)".
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