martes, 7 de mayo de 2013

Aguirre carga contra Montoro, al que acusa de no bajar los impuestos

MADRID.- La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha asegurado este martes que el "problema" del Gobierno es la convicción de no bajar los impuestos del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, con el que según ha explicado mantuvo "una discusión bastante encendida 'tête à tête'" sobre la reducción del sector público tras el comité ejecutivo del partido.

   "El problema del partido no es de comunicación, sino de convicción del ministro de Hacienda. Hay que bajar los impuestos", ha señalado Aguirre en declaraciones en Cadena Cope, en la que ha asegurado que tras el comité ejecutivo de este lunes mantuvo una "discusión bastante encendida 'tête à tête' con el ministro".
   En concreto, Aguirre ha detallado que la discusión con Montoro giró en torno a la reducción del sector público. "Es evidente que todo lo que es sector público, servicios que no tiene por qué prestar la Administración hay que reducirlos o privatizarlos, pero luego es evidente que las duplicidades hay que suprimirlas", ha señalado.
   En este sentido, Aguirre ha resaltado que Montoro "no tiene la misma convicción que ella sobre las subidas de impuestos" y que, por ello, se enfrentaron ayer. "Nosotros creemos en los impuestos bajos y creíamos que Montoro también creía en los impuestos bajos. Ahora estoy comenzando a dudarlo", ha subrayado.
   "Al ministro de Hacienda le gusta subir los impuestos y si no le gusta, no le disgusta tanto como a mí", ha apuntado la líder de los populares madrileños, quien ha recalcado que durante su mandato "Montoro no ha bajado ningún impuesto". A juicio de Aguirre, esta postura contrasta con las dos bajadas de impuestos, en sucesiones y donaciones, que se produjeron durante el primer Gobierno de José María Aznar.
   Asimismo, la presidenta de los 'populares' madrileños ha alertado de que "si Montoro quiere imponer la doble imposición, estará retrayendo la internacionalización de las empresas españolas". Así, Aguirre ha apuntado que las grandes empresas españolas han emprendido una estrategia de internacionalización y que, por ello, tributan en los países donde están situadas. "La doble imposición no existió nunca", ha remachado.
   "Lo que yo creo que tenemos que tener claro en el PP es que el ADN de nuestro partido es que no hay que subir ningún impuesto", ha subrayado Aguirre, quien ha insistido en que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, mantiene la misma posición que ella en este tema. "Desde luego al presidente el Gobierno no le gusta subir los impuestos", ha recalcado.
   Además, la expresidenta regional ha vuelto a pedir al presidente del Gobierno que cumpla con su programa y con lo que se dijo que sería "excepcional".
 "Ahora que la UE le ha dado a España una mayor holgura con el déficit, es el momento de cumplir lo que habíamos dicho y bajar los impuestos directos, tal como dijo Rajoy que iba a hacer", ha mantenido.
   "Creo que ayer Rajoy tuvo una intervención fantástica explicando lo que se debía haber explicado el 26 de abril en esa rueda de prensa tan deprimente que nos ofrecieron los miembros del Gobierno", ha recalcado la expresidenta, quien ha apuntado que el problema del Gobierno no es, por tanto, la comunicación sino "la convicción de Montoro" sobre los impuestos.

Montoro se enfrentó con Aguirre

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se había encarado este lunes en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional con la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, a la que había reprochado sus críticas en materia fiscal y había añadido que el Gobierno bajará los impuestos en cuanto pueda como ya hizo en 1999, porque son los mismos los que gobiernan y piensan lo mismo sobre la conveniencia de bajar impuestos, según han informado fuentes 'populares'.
   Rajoy había explicado ante la plana mayor del PP, en un discurso a puerta cerrada, que no tuvo más remedio que subir impuestos porque el año pasado España estuvo "a punto del crack" y era necesario una política de mayores ingresos. Dicho esto, había señalado que bajará los impuestos en cuanto sea posible, con el 2015 como tope.
   Aguirre había tomado después la palabra para pedir al jefe del Ejecutivo que aproveche que la UE ha relajado el déficit hasta el 6,3 por ciento del PIB para utilizar esa "holgura" en un rebaja del IRPF. Ella misma había dicho a los periodistas a la salida de este encuentro que la respuesta del presidente es que no será más allá del año 2015, lo que ella había interpretado como que no se descarta una bajada en 2014.
   Al hilo de la intervención de la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Montoro había pedido la palabra para recordar que cuando el PP ganó las elecciones en 1996 tardaron tres años en bajar los impuestos a los ciudadanos y había recordado que la propia Aguirre estaba en ese Ejecutivo del PP.
   De hecho, había destacado que mantienen la misma opinión que cuando ganaron en 1996 sobre la conveniencia de bajar impuestos, por lo que acabará bajando los impuestos en cuanto puedan. "Somos los mismos y pensamos en los mismos términos", había declarado, según fuentes asistentes a la reunión.
   En una intervención con un gran carácter pedagógico, el ministro había explicado lo que se hizo en el primer gobierno de José María Aznar, cuando se bajaron las plusvalías y se modificó el impuesto de donaciones y transmisiones patrimoniales. Según hubía agregado, ahora la subida ha sido en el impuesto de sociedades.
   El titular de Hacienda había recalcado que no han subido la fiscalidad de las pymes y van a ir al IVA de caja. Además, había señalado que en los años 90 no tuvieron que hacer un ajuste semejante en términos de gasto público al que están realizando ahora.
   En sus intervenciones, Rajoy había insistido en que no querían subir los impuestos, pero el riesgo de rescate que el año pasado padeció la economía española le obligó a una política de mayores ingresos para ahorrar 22.000 millones de euros: 20.000 procedentes de la reducción del gasto y 2.000 por la subida de impuestos.
   Al hilo de este asunto, el responsable de Política Municipal del PP, Manuel Cobo, había tomado la palabra para aclarar que la subida de impuestos no ha significado solo 2.000 millones, ya que, si no se hubieran subido se estaría hablando de unos 8.000 o 10.000 millones de ingresos menos, un dato que el propio Mariano Rajoy había corroborado después, según las mismas fuentes 'populares'.
   Durante esta reunión también había hablado la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, que se había quejado de que el crédito siga sin llegar a los ayuntamientos a pesar de la reforma del sistema financiero. Rajoy le había contestado asegurando que se va avanzando poco a poco en este terrero porque ya pueden financiarse Estado, CC.AA. y grandes empresas, algo que no ocurría al comienzo de la legislatura, han indicado las fuentes consultadas.
   Por su parte, la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, había tomado también la palabra para criticar la propuesta del secretario general de los socialistas, Alfredo Pérez Rubalcaba, de utilizar 30.000 millones del rescate bancario para créditos y había dicho que algunas ideas, como la relativa a que trabajadores y empresarios negocien las condiciones para evitar despidos, ya se recoge en la reforma laboral del Ejecutivo.
   La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, fue sido la primera en intervenir para admitir que España se encuentra en un momento complicado de gran "desconfianza" hacia los partidos políticos. Sin embargo, había afirmado rotunda que el PP no va a dar la callada por respuesta y va a demostrar que no tira la toalla.
   "El PP no se rinde nunca. Vamos a seguir peleando", había manifestado la 'número dos' del PP, según fuentes asistentes a este encuentro. A renglón seguido habría puesto en valor la unidad que hay en el seno del PP frente a la división que reina en este momento en las filas socialistas. "El PSOE está dividido, buscando a su líder", ha apostillado.
   Durante la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP también tomó la palabra la exalcaldesa de Málaga y miembro de la Mesa del Congreso, Celia Villalobos, que habría asegurado que el partido tiene que comunicar mejor, han informado las mismas fuentes.

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