MADRID.- Efectivos del Cuerpo de Agentes Forestales de la Comunidad de Madrid procedieron en el mes de noviembre a paralizar una corta de madera en un monte público de la región, al percatarse de que se estaban cortando más árboles de los que estaban autorizados, ha informado la Asociación Profesional de Agentes Forestales de Madrid.
El aprovechamiento de madera estaba siendo controlado por estos funcionarios públicos a petición del Área de Conservación de Montes de la Consejería de Medio Ambiente, cuyo personal ya sospechaba que se estaba extrayendo del monte más madera de la permitida.
Así pues, fruto de esta colaboración, se sorprendió a la empresa cortando ejemplares de pino resinero (Pinus pinaster) que no habían sido marcados previamente para su derribo.
Inmediatamente se procedió a levantar un acta de paralización cautelar de la obra y se elaboró un informe de daños que se adjuntó a la denuncia, donde se constató que ya se habían cortado ilegalmente más de 100 árboles.
El lugar donde se produjeron los hechos está catalogado como Monte de Utilidad Pública y forma parte de la Red Natura 2000, y en él viven especies protegidas por la legislación como el búho real, el milano negro, el milano real, el azor común, el aguililla calzada, el busardo ratonero o la cigüeña negra, así como otras especies emblemáticas de nuestra fauna como el jabalí, el corzo o el zorro rojo.
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