MADRID.- Los integrantes del Órgano de Dirección del Sector de la Administración General del Estado de CC.OO. han iniciado un encierro en la sede del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas de Madrid como primera acción dentro del proceso de denuncia de la situación de deterioro de los servicios públicos y las condiciones de trabajo de los empleados públicos.
Según CC.OO., existe un "absoluto desprecio" hacia la negociación colectiva, lo que supone una situación de conflicto. Por este motivo, se han encerrado en el Ministerio con el objetivo de que el titular de la cartera, Cristóbal Montoro, convoque y desarrolle procesos de negociación y consenso.
Uno de los representantes de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CC.OO., Juan Manuel Vera Carranco, ha señalado que son unas 30 personas y que llevan encerradas en el Ministerio desde las 11.30 horas de este miércoles.
Fuentes del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas indicaron a Europa Press que la directora general de la Función Pública, Carmen Sánchez Cortés, ya se reunió con los representantes sindicales la semana pasada y ha recibido instrucciones del secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, para volver a reunirse con ellos y desbloquear la situación.
Sin embargo, Carranco ha asegurado que el Gobierno aún no les ha dado ninguna respuesta ni ha hablado con ellos, y ha avanzado que convocarán movilizaciones en todos los territorios y centros de trabajo si el Ejecutivo no abre una negociación.
El sindicato afirma que la situación de deterioro que sufren la práctica totalidad de los organismos de la Administración General del Estado por la reducción de personal y los recortes presupuestarios supone un "grave déficit" en la prestación de servicios públicos así como "insoportables" condiciones de trabajo para un "significativo" volumen de la plantilla.
CC.OO. asegura que el encierro pretende ser una "llamada de atención" al Gobierno para que sea consciente de las condiciones en las que se desarrollan los servicios públicos, en muchos casos "al borde del colapso". "Los propios gestores y responsables de los diferentes organismos se muestran desorientados e incapaces de garantizar los servicios a la ciudadanía", advierte.
A su parecer, el empeño de llevar adelante una política de recortes "desorbitada" y los criterios con los que se está diseñando pueden llevar a la desaparición de un importante número de servicios esenciales cuya competencia corresponde a la Administración General del Estado.
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