MADRID.- El presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato, opina en un vídeo incluido en la página web de la candidatura del PP a la Alcaldía de Madrid que el actual sistema de financiación local y autonómico está "obsoleto" y que en el "próximo periodo político en España" será "necesario" realizar "un debate profundo sobre el sistema tributario".
La web de la candidatura de Alberto Ruiz-Gallardón incluye artículos de opinión diarios de diferentes aspectos que se tratan en la campaña, así como vídeos en los que el primer edil 'entrevista' a expertos sobre las materias que se tratan diariamente.
Así, el vídeo que se ha colgado este domingo versa sobre la financiación local y en él Rato señala que "el sistema de financiación público español, tanto de las autonomías como de los ayuntamientos, ya hace tiempo que está obsoleto y necesita, no un parche, sino una revisión amplia".
"Al mismo tiempo, si queremos ser una sociedad competitiva que genere empleo, los impuestos del Estado tienen que ser repensados para generar ingresos pero también para no frenar la actividad económica. En el próximo periodo político en España será necesario (hacer) un debate profundo sobre el sistema tributario, por las razones que dan los ayuntamientos pero también por la propia actividad económica", zanja el presidente de Caja Madrid.
En el mismo documento, el candidato del PP a la reelección al frente de la Alcaldía de la capital defiende, como ha venido haciendo durante la última legislatura, la necesidad de que se cree un "verdadero sistema de corresponsabilidad fiscal" en el que "los ingresos que reciben las ciudades sean correspondientes a las políticas" que los municipios llevan a cabo.
Es decir, que su objetivo es que las políticas de inversión y las de gasto dejen de tener "el mismo tratamiento de retorno en cuanto al sistema de financiación", para que la participación de los municipios en los impuestos estatales sea equivalente a la nueva riqueza que son capaces de crear mediante sus inversiones.
"Si como consecuencia de nuestras inversiones generamos más riqueza, (es necesario) que tengamos mas participación en los tributos del Estado", ha continuado el dirigente 'popular', que ha recordado que la capital aporta el 12 por ciento del PIB nacional --cantidad sólo superada por Cataluña, Andalucía y la propia Comunidad de Madrid-- y, sin embargo, no ve un retorno equivalente.
Porque, a juicio de Gallardón, no es justo que no se premien las políticas de inversión y que, sin embargo, "las ciudades que han realizado políticas exclusivamente de gasto no hayan visto reducidos sus ingresos a pesar de que ha disminuido la recaudación".
De hecho, este tipo de iniciativas están recogidas en el programa electoral de Gallardón, donde se apuesta por "dar un paso al frente y seguir liderando la reivindicación de las grandes ciudades sobre la necesidad de cambiar el sistema de financiación local para que se modernice y se adapte a las nuevas circunstancias económicas y sociales" aunque "sin merma de la solidaridad intermunicipal que debe garantizar el acceso a servicios públicos similares por parte de los ciudadanos en cualquier parte del territorio nacional".
Esta necesidad es, según el candidato del PP, particularmente acuciante en Madrid, que por su condición de capital debe beneficiarse a su juicio de un "compromiso de compensación financiera" que recoge la Ley de Capitalidad.
Por eso, si gana las elecciones, el actual primer edil se ha comprometido a continuar insistiendo en sus peticiones de modificaciones fiscales para que los ayuntamientos tengan más margen de gestión de los tributos.
Esto permitiría cumplir algunas de las propuestas incluidas en su programa electoral, como la creación de un IBI Social con bonificaciones de hasta el 50 por ciento en función de la renta y un tipo progresivo según el valor del inmueble, lo que dotaría a este impuesto de "más justicia tributaria".
Además, se ha comprometido a continuar "demandando de la Administración del Estado la modificación del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) a través de un coeficiente corrector de la tarifa del impuesto (por ejemplo, gravando en menor medida a las actividades que atraviesen dificultades económicas) para dotar de mayor autonomía fiscal a los municipios", así como a mantener las bonificaciones a las empresas que incrementen el promedio de su plantilla de trabajadores con contrato indefinido.
Con respecto al Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), Gallardón reclama un cambio del marco normativo actual para que se tenga en cuenta, entre otros, "el factor medioambiental como elemento determinante del tributo, beneficiando fiscalmente a los vehículos menos contaminantes", así como se piense una "solución definitiva al problema de la deslocalización de las flotas de vehículos de empresas que minoran la recaudación del tributo en la ciudad".
También alude al Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) en el programa, un impuesto que cree que debe "adaptarse a la nueva realidad urbanística actual, evitando las inequidades fiscales que se producen en la actualidad, en función del tipo de construcción, instalación u obra que se realice".
Pide por último que se "reconfigure" el Impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, "modificando determinados componentes arbitrarios en la determinación de la capacidad económica sometida a gravamen y sometiendo a tributación las plusvalías más especulativas, como son las generadas en periodos inferiores al año".
Finalmente, la propuesta del PP para el Ayuntamiento incluye su intención de insistir en la modificación de la normativa para que los beneficios fiscales obligatorios en los tributos locales que decide el Ejecutivo central (como el cheque bebé o los 400 euros) sean "compensados a los municipios o, en su defecto, que sean convertidos en potestativos para que sean los propios municipios los que decidan sobre su aplicación".
También se reclama un debate sobre las competencias impropias y la duplicidad de servicios. "Es imprescindible superar una asignatura pendiente, y que constituye un auténtico lastre para las finanzas municipales, como es la financiación de las denominadas competencias impropias, y hacerlo mediante transferencias incondicionadas como puede ser la participación en los ingresos autonómicos", reza el programa.
"El actual marco de déficits públicos, generado por el desplome de los ingresos públicos, impone a los gobiernos una reflexión profunda y urgente sobre la necesidad de acometer reformas en el sistema de competencias y de su financiación. Cuando una de las palabras más usadas en los últimos años ha sido la de 'ajuste' o 'reducción' del gasto público, que en muchos casos está obligando a reducir servicios, es cuando se hace imprescindible abordar auténticas reformas estructurales desde el punto de vista organizativo, que llevará necesariamente a un ahorro a medio y largo plazo mucho más relevante que los meros ajustes y, lo que es más importante, seguramente sin necesidad de reducir prestaciones o servicios públicos", concluye.
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