MADRID.- El cadáver de Austin Taylor Bice, el estudiante californiano hallado muerto en el río Manzanares, ya ha sido entregado a la familia, que repatriará su cuerpo a su lugar de origen, San Diego, donde este domingo se oficiará un funeral en su memoria.
El cuerpo del joven ha permanecido desde el martes en el Instituto Anatómico Forense, donde se le han realizado análisis y extraído tejidos. El avance del informe de la autopsia fue remitido la semana pasada al Juzgado de Instrucción de Madrid número 52 de Madrid, que se encarga del caso. En el mismo se indica que el estadounidense murió de una parada cardiorrespiratoria.
No se han hallado golpes ni otros signos que determinen que falleció de forma violenta, por lo que se sustenta la principal hipótesis, consistente en que cayó de forma accidental al río y murió ahogado. La Policía, por su parte, da por resuelto el tema, ya que todo apunta a una muerte accidental.
La familia y amigos del fallecido se muestran "sorprendidos" con esta posibilidad porque aseguran que Austin era deportista y sabía nadar. El informe definitivo de la autopsia tardará tres semanas en concluirse, según han indicado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM). De momento, la familia, ya con el cuerpo a su disposición, están preparando los trámites burocráticos para repatriarlo a Estados Unidos.
Mientras, los conocidos y allegados a Austin están preparando algún un acto en homenaje al estadounidense en España, posiblemente en la Universidad Carlos III de Madrid, donde estudiaba.
Por su parte, ya está fijado para este domingo un funeral en su memoria en San Diego, ha informado a un portavoz de los amigos del fallecido.
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